En los últimos años, el uso de lentes de contacto por parte de los niños ha ido en aumento y a edades cada vez más tempranas. Los padres contemplan esta alternativa por las ventajas que el uso de lentes  ofrece frente a las gafas tradicionales. Pero, ¿a partir de qué edad se pueden utilizar las lentes de contacto? ¿Qué beneficios aportan y qué consideraciones hay que tener en cuenta? Hoy hablamos del uso infantil de las lentes de contacto.

Uso Infantil de las Lentes de Contacto

Aunque no existe una edad establecida de forma rígida, generalmente se recomienda que los niños puedan manipular con responsabilidad y cuidado las lentes de contacto a partir de los 8 o 10 años. La clave está en que el niño tenga cierta madurez, responsabilidad y comprensión de la importancia del cuidado adecuado de las lentes. Es fundamental que el uso sea supervisado inicialmente por un profesional y, con el tiempo, los niños puedan aprender a cuidarlas por sí mismos bajo la orientación de sus padres y de los ópticos-optometristas.

¿Qué Problemas pueden Solucionar?

Las lentes de contacto son dispositivos ópticos que se colocan directamente sobre la córnea (la capa exterior transparente del ojo) para corregir problemas de visión. Son una alternativa a las gafas y pueden ser muy efectivas para tratar los defectos refractivos más comunes; miopía, hipermetropía y astigmatismo.

Un tipo de lentes muy utilizadas en los últimos años por niños y adolescentes son las lentes orto-k. Estas lentes se usan por la noche, durante el sueño. Moldean la córnea de tal manera que, durante el día, pueden ver perfectamente sin necesidad de utilizar corrección visual (gafas ni lentillas). La ortoqueratología está enfocada a frenar la progresión de la miopía, tan habitual hoy en día en niños en edades cada vez más tempranas. Gracias al uso de las lentes orto-k, de lentes oftálmicas de desenfoque periférico y de lentillas de desenfoque miópico, se está reduciendo el riesgo de que los jóvenes desarrollen miopía magna, una de las principales causas de discapacidad visual en la vida adulta.

Lentes de Contacto contra el Acoso Escolar

El 2 de mayo se ha conmemorado el Día Internacional contra el Acoso Escolar, una fecha que nos invita a reflexionar sobre porqué ocurren estas situaciones y cómo evitarlas. Son diversas las líneas de actuación que se pueden adoptar y, aunque no vamos a profundizar en ellas, sí creemos que es importante trabajar la autoestima de los pequeños.

Aunque puede parecer algo del pasado, aún hoy el uso de gafas puede ser motivo de rechazo o de comentarios ofensivos entre los propios compañeros de clase. Las lentes de contacto eliminan esas barreras, ayudando a que los niños se sientan más seguros y confiados consigo mismo y con los demás.

El uso de lentes de contacto puede aportar mayor seguridad y confianza durante la infancia. Los niños que usan lentes de contacto no tienen que preocuparse por que sus gafas se muevan, se caigan o se rompan durante actividades físicas o juegos, lo que les permite moverse y jugar con mayor libertad, igual que el resto de sus compañeros. Además, las lentes de contacto ofrecen un campo de visión más amplio lo que favorece la visión en actividades deportivas y recreativas.

Y todo ello sin olvidar que hoy en día la estética es muy importante también en la infancia. El uso de gafas puede causar rechazo por parte de los niños ya que afecta a su imagen.

Niños y Lentes de Contacto

Los ópticos-optometristas de Federópticos están capacitados para, en caso de necesitar corrección visual, recomendar la solución que mejor se adapte a las necesidades de los pequeños. Entre otras, el uso de  lentes de contacto. Si se deciden a usarlas, les enseñan, tanto a ellos como a sus padres cómo manipularlas y como llevar a cabo un correcto mantenimiento de las mismas.

La supervisión de un adulto en las primeras etapas es imprescindible, pero con el tiempo, los niños pueden hacerse responsables de su cuidado, siempre bajo las indicaciones de profesionales.

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