Durante los meses de verano se incrementan los desplazamientos de vehículos por las carreteras. Y es que verano y vacaciones suelen ir de la mano.

Para muchas personas, las vacaciones comienzan poniéndose al volante del vehículo para viajar a la playa, a la montaña, al pueblo…Unos días para salir de la rutina, descansar o sencillamente, cambiar de aires.

Habitualmente los conductores suelen acudir al taller antes de realizar un viaje largo para comprobar que el coche está en perfecto estado y evitar de esta manera, sorpresas desagradables.

Sin embargo, ese cuidado con el vehículo, no se suele trasladar al propio conductor.

Problemas de Visión en Conductores

La vista es el sentido fundamental para conducir y para hacerlo de manera segura. El 90% de la información que recibe el conductor procede de la vista. Por eso, disponer de una buena visión es muy importante a la hora de ponerse al volante. Una visión en óptimas condiciones asegura poder tomar las decisiones adecuadas durante la conducción y hacerlo rápidamente ante cualquier eventualidad.

Según un estudio llevado a cabo por Essilor y la Federación Internacional del Automóvil, casi el 30% de los conductores españoles tiene problemas para ver con nitidez debido a su miopía o hipermetropía. El 14% muestra dificultades de visión en condiciones óptimas de iluminación, subiendo a un 38% cuando el entorno presenta una mayor oscuridad.

El estudio también pone de manifiesto que el 23,5% presenta deficiencias en la visión lateral y que, ante un deslumbramiento, el 44% tarda aproximadamente 20 segundos en recuperar la visión central.

Revisiones Visuales

De manera periódica, y especialmente a partir de la edad en la que comenzamos a desarrollar presbicia (pérdida de visión que se produce como consecuencia del paso del tiempo), es muy importante acudir a revisiones visuales periódicas. De esta manera, podemos conocer el estado de la vista y tomar las medidas oportunas para contar con la mejor visión posible.

Es importante revisar la vista, sobre todo antes de hacer trayectos largos y por la noche. Y es que la conducción nocturna reduce la agudeza visual y provoca una peor percepción de la profundidad.

La mejor opción para aumentar la seguridad en la carretera es utilizar gafas graduadas o lentillas que resuelvan los problemas de visión del conductor. Por otra parte, las gafas de sol polarizadas  son buenas para evitar deslumbramientos durante el día. Este tipo de lentes evitan la fatiga visual y contribuyen a lograr mayor seguridad en la conducción.

Por otra parte, es aconsejable que los présbitas, que además tienen otros defectos de refracción (miopía, hipermetropía o astigmatismo), utilicen gafas progresivas durante la conducción. Este tipo de lentes facilitan ver bien a distancias cortas (salpicadero) y largas (señales de tráfico, avisos luminosos…).

Ver bien aporta una mayor comodidad a la hora de conducir, lo que incide, de manera definitiva, en una conducción más segura.

Revista tu vista antes de salir de vacaciones y disfruta de tus vacaciones.