Durante las vacaciones de verano son muchas las personas que deciden pasar unos días fuera de su lugar de residencia habitual. Cambiar de aires, como se suele decir, es la mejor manera de alejarse de la rutina. Para ello, es común poner el coche a punto para salir a la carretera a recorrer unos kilómetros. Pero también es muy importante, de cara a evitar accidentes, revisar la vista antes de salir a la carretera.

La Visión en la Conducción

La mayoría de las decisiones que se toman durante la conducción, están relacionadas con la visión. Y es que la información que le llega al conductor procede en un 90% de la vista. Disponer de una buena visión es imprescindible para que el conductor pueda tomar la mejor decisión ante un imprevisto, y en el menor tiempo posible. En definitiva, una correcta visión puede reducir el riesgo de sufrir accidentes al volante.

Hace unos años, Fesvial (Fundación para la Seguridad Vial), la Universitat de València y Essilor España, llevaron a cabo un estudio sobre la visión de los conductores españoles. Los resultados de este estudio, vigentes a día de hoy, sirvieron para poner en marcha una campaña de concienciación sobre la importancia de las revisiones visuales.

Según este estudio, en el que se entrevistó y analizó la vista de más de 3.000 personas, la mayoría de los conductores opinaba que tener una mala visión es el principal factor de riesgo en la conducción, por delante de beber dos cervezas o utilizar el móvil.

Esta percepción era especialmente destacada para los conductores que utilizaban gafas o lentes de contacto y los que revisaban su vista de manera periódica.

Problemas de Visión en Conductores

Los principales problemas de visión de los conductores están relacionados con los errores de refracción. La miopía o el astigmatismo dificultan ver bien la carretera, las señales de tráfico…El problema se suele complicar cuando la persona, debido al paso del tiempo, desarrolla presbicia. Aparecen entonces problemas para enfocar y ver correctamente la información del panel del control del vehículo.

Para solucionar estos problemas y lograr una conducción segura, es prioritario utilizar gafas o lentes de contacto. Los présbitas con algún problema previo de visión pueden utilizar gafas o lentes progresivas que les permiten ver bien a cualquier distancia.

Otro problema que afecta a los conductores es el deslumbramiento. Para evitar que los rayos del sol fatiguen la vista, se pueden utilizar gafas de sol o gafas de sol polarizadas. Su uso aporta un descanso a la visión que evita que los ojos sufran.

Para comenzar a disfrutar de las vacaciones desde que subimos al coche, lo aconsejable es acudir a una revisión visual previa al viaje. De esta manera se puede conocer el estado de la salud visual y poner remedio a cualquier problema que se detecte.

¡Todavía estás a tiempo de pedir cita antes de salir a disfrutar de tus días de vacaciones!