Cuando llega la primavera y los días son más largos, son muchas las personas que salen a practicar sus deportes favoritos al aire libre. Los parques se llenan de personas de todas las edades que salen a pasear, correr, montar en bicicleta o que quedan con los amigos para jugar al fútbol o al baloncesto. Pasar tiempo al aire libre es beneficioso para la vista. Entre otras cosas, reduce las probabilidades de desarrollar miopía. Sin embargo, practicar deporte al aire libre también puede conllevar ciertos riesgos para la vista. Por eso es necesario contar con protección visual para hacer deporte en primavera.

Protección Visual en Primavera

Uno de los principales riesgos de practicar deporte al aire libre es la exposición de los ojos a los rayos del sol. La radiación solar está relacionada con la altura del sol. A mediodía los rayos son más intensos y hace más calor. Por eso, es preferible practicar deporte a primera hora de la mañana o a última de la tarde.

Los rayos del sol, en concreto los rayos ultravioleta, pueden ser muy peligrosos para la salud visual. Pueden dañar diferentes estructuras del ojo y provocar daños en la conjuntiva, en la córnea y en la retina. Los rayos del sol, a la larga, pueden favorecer el desarrollo de cataratas y provocar degeneración macular asociada a la edad (DMAE).

Para evitar la exposición a los rayos solares, es conveniente utilizar gafas de sol con protección ultravioleta. Sólo las gafas que cuentan con certificación de calidad, y que se venden en los centros ópticos, pueden asegurar que cuentan con protección contra los rayos del sol. Las gafas de sol que se venden en mercadillos y bazares pueden ser algo más baratas pero a la larga, son muy caras porque pueden poner en peligro la salud de los ojos. Lo más importante de las gafas de sol son las lentes. De hecho, es preferible no utilizar gafas que utilizar gafas de sol sin protección contra los rayos ultravioleta (UV).

Las gafas de sol también pueden graduarse para resolver los problemas refractivos, como la miopía, hipermetropía, el astigmatismo o la presbicia.

Deportes y Protección Visual

Practicar deporte al aire libre no solo conlleva un cierto riesgo para la salud visual por los rayos ultravioleta del sol. Al correr, patinar o montar en bicicleta, los ojos están expuestos a la entrada de pequeños insectos, hojas o polen, especialmente en los días de viento.

Para evitarlo es conveniente utilizar gafas de sol envolventes. Estas cubren los ojos de manera mantienen los ojos a salvo y permiten disfrutar del deporte con una mayor seguridad. También es conveniente que las gafas deportivas cuenten con protección solar.

Por otra parte, la práctica de algunos deportes también puede suponer un riesgo para la salud visual de los deportistas. En los deportes de equipo (baloncesto, fútbol…) o en los que se utiliza una bola (tenis, padel…) no es conveniente utilizar gafas. Un impacto en la cara puede romper las gafas con el peligro que eso supone para los ojos.

Cada vez son más las personas, y cada vez más jóvenes (incluso niños) que optan por el uso de lentes de contacto para ver correctamente mientras practican su deporte favorito. El uso de lentes, además de aportarles seguridad, les ofrece un mayor confort al poder moverse sin peligro de caída o rotura de las gafas, y les permite desarrollar un mejor juego y/o conseguir mejores resultados deportivos.

Practicar deporte es beneficioso para la salud en cualquier época del año, pero en primavera, cuando resulta más atractivo practicar deporte al aire libre, es importante proteger los ojos. Protegiéndolos, se protege la salud visual del deportista.

Acércate a cualquiera de nuestros centros de salud visual y nuestros ópticos-optometristas te recomendarán las gafas o lentes de contacto que mejor se adapten a tus necesidades visuales y al deporte que practiques.