Cada vez somos más conscientes de que las gafas de sol, más allá de un complemento de moda, son imprescindibles para proteger los ojos frente a los dañinos rayos del sol. Los rayos ultravioleta que emite el sol favorecen la aparición de problemas serios en los ojos como cataratas, envejecimiento de retina y degeneración macular asociada a la edad.

Pero ¿y los niños? ¿No debemos proteger los ojos de los niños de los rayos del sol?

La respuesta es sí. De hecho, según el Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Andalucía, el cristalino del ojo de los menores deja pasar más del 75% de la radiación ultravioleta. A partir de los 30 años, solo pasa el 10%.

Los profesionales advierten de que el cristalino de los niños termina de desarrollarse en torno a los 12 años por lo que consideran fundamental ofrecer una ayuda extra a los ojos, especialmente hasta ese momento. Las gafas de sol son la mejor ayuda. Sin embargo, no es habitual ver a los pequeños utilizando gafas de sol.

Los padres, que suelen prestar especial atención al cuidado de la piel de los niños para evitar las quemaduras solares, no son conscientes de que, esos mismos rayos de sol pueden provocar daños oculares en sus pequeños al cabo de unos años. Y es que, al igual que sucede en la piel, los efectos de los rayos de sol son acumulativos.

Gafas de Sol y Niños

Con mayo se inauguran los meses centrales del año en los que los rayos del sol inciden de manera más perpendicular sobre nuestro país, los días son más largos y pasamos más tiempo al aire libre.

Es un buen momento para que los niños comiencen a utilizar gafas de sol.

Las gafas de sol para niños no son juguetes y por tanto no deben adquirirse en jugueterías, mercadillos o bazares. Las gafas para niños, igual que el resto de gafas graduadas y de sol, son productos sanitarios.

Sirven para proteger la salud visual de las personas y por lo tanto deben adquirirse en establecimientos sanitarios dirigidos por profesionales. En estos centros, las gafas de sol cumplen las normas de seguridad establecidas por las autoridades competentes.

Sólo en las ópticas podemos estar seguros de que las gafas de sol para niños sean seguras y protejan los ojos de los rayos del sol.

Utilizar gafas de sol adquiridas en bazares o mercadillos puede ser más peligroso que no utilizar gafas si los cristales no cuentan con filtros de protección.

Efectos de los Rayos Ultravioleta

Una prolongada exposición solar puede provocar a largo plazo problemas en los ojos como lesiones corneales y conjuntivales, degeneraciones de retina, cataratas prematuras y alteraciones oculares que terminan afectando a la visión.

Los efectos de los rayos ultravioleta también pueden manifestarse a corto plazo entre los niños provocándoles dolor ocular, fotofobia, jaquecas y enrojecimiento de ojos.