Las tomografías de coherencia óptica (OTC) pueden alertar del desarrollo de problemas cardiovasculares en las personas. Así lo revelan los investigadores del Instituto Oftalmológico Shiley de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos), tras un estudio realizado y que ha sido publicado recientemente en la revista científica EClinical Medicine y compartido por Infobae.

¿Qué es una OTC?

Una tomografía de coherencia óptica es una técnica de imagen tomográfica, no invasiva que ofrece una penetración, a través de ondas de luz, en el tejido que se vaya a analizar. La OTC permite realizar una fotografía virtual de las distintas capas de la retina. En la actualidad es una técnica de imagen ampliamente aceptada en oftalmología.

Esta técnica permite el diagnóstico, control y seguimiento de los problemas de la mácula y la retina. También hace posible evaluar el estado de la córnea y del nervio óptico.

Esta prueba es de gran ayuda para la detección precoz y el seguimiento de los pacientes con glaucoma o los que sufren neuritis óptica. La tomografía de coherencia óptica permite al oftalmólogo detectar pequeños cambios en la retina del paciente que suelen pasar desapercibidos en otras pruebas.

Es una prueba rápida, indolora y que no precisa de anestesia ya que no requiere un contacto directo con el ojo.

Retina y Problemas Cardiovasculares

El equipo de investigación de la universidad estadounidense examinó la retina de diferentes pacientes utilizando tomografías de coherencia óptica. Descubrió que las personas que habían padecido una isquemia (disminución de flujo sanguíneo causado por una enfermedad cardiaca) tenían pequeñas señales o marcas en su retina. Estas marcas reciben el nombre de lesiones perivasculares isquémicas de la retina (RIPL).

Las marcas de la retina pueden actuar como un marcador para anticipar posibles problemas cardiovasculares. Así, cuantas más marcas se detecten en la retina, más probabilidades tendrá la persona de desarrollar una enfermedad cardiovascular.

Poder detectar, de manera precoz, posibles problemas cardiovasculares, hará posible que los médicos puedan anticiparse a los mismos, evitando muchos de ellos.

Hasta el momento, otras pruebas como el examen del fondo de ojos, permiten explorar la retina y sus arterias y evaluar estadios de la arteriosclerosis, la hipertensión y la diabetes. Sin embargo no suele utilizarse en las consultas de cardiología.