Contaminación y su Impacto en la Salud Visual COMPÁRTELO Salud visual 2 noviembre, 2025 Nuestros ojos son órganos que nos permiten ver e interactuar con el mundo que nos rodea. Sin embargo, por el lugar en el que están situados son muy sensibles y vulnerables a diversos factores externos. Uno de los riesgos crecientes para nuestra salud ocular es la contaminación, un problema que afecta especialmente a quienes viven en zonas urbanas. Conocer los riesgos de la contaminación y saber qué podemos hacer para prevenir o actuar al notar los primeros síntomas es el objetivo de este artículo. Hoy, hablamos de la contaminación y su impacto en la salud visual. Contaminación y su Impacto en la Salud Visual En las ciudades, la calidad del aire suele ser pobre debido a la presencia de partículas finas, gases tóxicos, humo, polvo y contaminantes derivados de la actividad industrial, el tráfico y otras fuentes. Estas partículas pueden ingresar en nuestros ojos por contacto directo con el aire. Además, factores como el viento, la humedad y las condiciones climáticas pueden incrementar la exposición a contaminantes. La contaminación que afecta a los ojos puede proceder de las partículas en suspensión que, debido a su tamaño, y a que se encuentran flotando en el aire, pueden penetrar fácilmente en los ojos y causar irritación. Los gases tóxicos, como los óxidos de nitrógeno, liberados al aire desde los tubos de escape de vehículos motorizados y otros compuestos volátiles, como el humo y el polvo pueden irritar la superficie ocular. También hay sustancias contaminantes en espacios interiores. Los productos químicos que se utilizan para limpiar o el humo del tabaco pueden irritar los ojos. Efectos de la Contaminación en los Ojos La exposición constante a estos agentes puede generar diversos problemas oculares. La inflamación de la conjuntiva provoca ojos rojos e irritados. La contaminación también puede alterar la producción de lágrimas, lo que da lugar a molestias como picazón, ardor y visión borrosa. Las partículas contaminantes pueden abrir la puerta a bacterias y virus, aumentando el riesgo de conjuntivitis u otras infecciones. Y en el peor de los casos pueden provocar o empeorar problemas crónicos como la blefaritis (inflamación de los párpados) o la queratoconjuntivitis seca, que pueden afectar la visión a largo plazo. Cómo Proteger los Ojos En ambientes con altos niveles de contaminación es conveniente utilizar gafas de protección o gafas de sol envolventes que reducen la entrada de partículas en los ojos. Además, es importante mantener una buena higiene ocular. Esto pasa por lavar los ojos con agua limpia siempre que se sienta irritación evitando frotarlos con las manos sucias. También se pueden utilizar lubricantes o lágrimas artificiales para limpiar la superficie ocular y aliviar la sequedad causada por la contaminación. Lo ideal es evitar la exposición prolongada a espacios con alta contaminación; lugares próximos a carreteras o a chimeneas industriales. El uso de purificadores de aire es una buena opción en el interior. Si a pesar de todas estas medidas los síntomas como dolor de ojos, sensación de arenilla o problemas visuales no desaparecen, es preciso acudir al médico para que valore el estado de los ojos y la visión. Los profesionales de Federópticos también pueden revisar la salud visual a través de la realización de una serie de pruebas que determinan si la visión se está viendo afectada. Si estás preocupado por la salud de tus ojos, acude a Federópticos y pide cita. ETIQUETADO ENcontaminación, higiene ocular, salud ocular COMPÁRTELO