En otoño disfrutamos de menos horas sol porque los días se acortan y las noches se alargan. Por este motivo, especialmente durante las tardes, pasamos muchas horas bajo la luz artificial de las bombillas.

Trabajar, estudiar o realizar cualquier tipo de actividad sin luz natural incide en el rendimiento de las personas. Está probado que la luz del sol genera endorfinas que mejoran nuestro estado de ánimo y hacen que nos sintamos más felices. Sin embargo, la luz artificial unida a otros factores, como la exposición excesiva a pantallas digitales, puede provocar fatiga visual.

Fatiga Visual en Otoño

Se conoce la fatiga visual como el conjunto de molestias que se presentan en el ojo como consecuencia de un esfuerzo continuado. Cuando pasamos tiempo realizando una tarea y forzando la vista de cerca o cuando debemos cambiar la acomodación visual entre dos distancias de manera constante, los músculos oculares se cansan.

La fatiga visual también se produce después de realizar una actividad con una iluminación inadecuada, bien sea por exceso o por defecto.

Las personas que desarrollan fatiga visual  sienten molestias oculares (escozor, sensación de arenilla, picor…) que, en ocasiones, aparecen acompañadas por dolor de cabeza. Pueden inflamarse los párpados e incluso aparecer dificultades para enfocar los objetos.

Los signos de la fatiga ocular se agudizan cuando hay falta de sueño.

Ojos Sanos y Relajados

La prevención es importante para mantener los ojos relajados. En este sentido, a la hora de preparar un lugar de trabajo o estudio, es conveniente situar la mesa cerca de una ventana, tamizando los rayos del sol. Es conveniente evitar los reflejos en la pantalla del ordenador y adecuar el brillo del dispositivo para obtener un mayor confort visual.

Si se va a pasar tiempo frente al ordenador, hay que recordar que, cada 20 minutos aproximadamente, los ojos deben dirigirse a una distancia de unos 6 metros para enfocar allí un objeto durante unos 20 segundos. De esta manera, se facilita el descanso de los músculos ciliares.

Ejercicios Oculares

Masajear los ojos cada cierto tiempo ayuda a combatir la fatiga visual. Con ayuda de una crema hidratante, se pueden hacer masajes en círculo en el contorno de los ojos con los párpados cerrados.

Fijar la vista en la pantalla mientras trabajamos, hace que los parpadeos se reduzcan. Por eso, es una buena opción, durante la jornada, parpadear varias veces seguidas rápidamente. Después de cerrar los ojos unos segundos, volver a llevar a cabo el parpadeo. Este ejercicio ayuda a relajar el ojo y a mantenerlo lubricado, evitando la sequedad ocular.

Para relajar los músculos oculares es una buena opción realizar una especie de gimnasia de ojos consistente en mover los ojos de arriba abajo y de derecha a izquierda sin mover la cabeza, o mover los ojos en círculo hacia un lado y hacia otro.

Además de todo ello, una buena alimentación y dormir las horas necesarias, son fundamentales para tener los ojos sanos y relajados.