El 4 de marzo se celebra el Día Mundial contra la Obesidad. La obesidad es la acumulación excesiva de grasa que se produce debido a diferentes factores y que puede afectar seriamente a la salud de la persona en general y a su salud visual en particular. Pero ¿cuáles son los riesgos sobre la visión que aparecen como consecuencia de la obesidad? Y ¿qué podemos hacer para evitarlo? Hoy, lo analizamos en este artículo, dejando claro desde el principio que es necesario bajar de peso para proteger la salud visual.

Riesgos de la Obesidad para la Salud Visual

El número de personas obesas en todo el mundo no para de crecer. Así lo señala la Organización Mundial de la Salud que indica que, desde el año 1975 esta enfermedad se ha triplicado. Según datos de la Federación Mundial de la Obesidad, en 2030 mil millones de personas padecerán obesidad. Una verdadera pandemia.

La obesidad, u acumulación de grasa en el organismo, puede facilitar el desarrollo de otras enfermedades. Las más comunes son la hipertensión arterial y la diabetes tipo II. Además, es habitual que la obesidad favorezca altos niveles de colesterol, problemas articulares, apnea de sueño y el desarrollo de algunos tipos de cáncer.

La obesidad puede provocar problemas serios para la visión. De hecho, según las últimas investigaciones, la obesidad está relacionada con cuatro enfermedades importantes; la DMAE, el glaucoma, las cataratas y la retinopatía diabética.

Los últimos estudios realizados señalan que hay una relación directa entre los altos niveles de grasa corporal y la progresión de la DMAE (Degeneración Macular Asociada a la Edad).

Se considera la obesidad un factor de riesgo para el desarrollo de la retinopatía diabética. La retinopatía diabética es la enfermedad vascular más frecuente de la retina y tiene su origen en el daño que se produce en los vasos de la retina  como consecuencia de la diabetes. Los niveles elevados de glucemia provocan una proliferación de vasos sanguíneos anómalos en la retina que originan hemorragias. Estas causan una disminución de la visión de forma brusca.

Por su parte, la hipertensión y los problemas cardiovasculares, directamente relacionados con el sobrepeso y la obesidad, favorecen el desarrollo de cataratas, la principal causa de ceguera en el mundo.

Prevención para Proteger la Salud Visual

La mejor manera de prevenir el sobrepeso es mantener una dieta equilibrada en la que predominen los productos frescos y naturales y se eviten o limiten los precocinados, los productos azucarados y las grasas.

Además es importante realizar algún tipo de ejercicio físico habitual para tratar de quemar el exceso de calorías. Según una sencilla regla, cuantas más calorías consumamos, más ejercicio tendremos que hacer para eliminarlas.

Bajar de peso es la mejor manera de proteger la salud visual, evitando o minimizando el riesgo de desarrollar enfermedades visuales derivadas de la obesidad.

Es conveniente que las personas con hipertensión o diabetes, o antecedentes en su familia, revisen su visión de manera periódica. Así podrán conocer lo antes posible cualquier complicación visual, incluso antes de que se manifiesten los síntomas, y conseguir un tratamiento rápido y efectivo.